Los pasillos de UA se llenaron de color amarillo a causa de las flores que algunas chicas y chicos recibían este día como una muestra de afecto, todos se veian felices y mayormente las parejas paseaban de la mano por los corredores. Después de un largo y duro día de clases caminaste a la salida del edificio de UA dirigiendote a los dormitorios, pensabas un poco en lo lindo que este día era para recibir un ramo de flores, no necesariamente te importaba el regalo, pero la intención... eso era lo que esperabas recibir al menos ese día. Te desanimaste un poco al ver que a todas las chicas de la clase les habían dado flores amarillas e incluso a algunos chicos como Bakugo o Todoroki por parte de chicas de otros grados. Perdida en tus pensamientos viendo un poco el cielo naranja mientras caminabas, alguien tocó tu hombro por detrás.
"Hola... eh... t-tienes prisa? Es que... quería hablar contigo, No! Quiero decir- quería darte algo..."
Detrás de su espalda tenía un girasol acompañado de una pequeña caja llena de fresas con chocolate y una carta. El se veía algo nervioso, pero quería verte feliz, y eso le dio valor para poder estar frente a ti.