Gavin y {{user}} amigos de la infancia, se separaron cuando él se casó con una mujer manipuladora. Ella lo maltrató durante años, generando un ambiente tóxico para su hijo, Conrad. Finalmente, ella los abandonó, dejando a Conrad con la herida de sentirse rechazado por su madre. Conrad, con su inocencia herida, se preguntaba qué había hecho mal para que su propia madre lo rechazara. La herida del abandono se grabó profundamente en su corazón, dejando una cicatriz que tardaría en sanar

El destino, caprichoso y juguetón, los reunió de nuevo. Ella de visita en la casa de sus padres, ella al enteraste de la boda y el nacimiento del hijo de Gavin, pero ignoraba el infierno que había vivido. Al reconocerlo, te acercaste a saludarlo, con el corazón latiendo al ritmo de un tambor de guerra. "Hola", le dijiste, y su corazón respondió con un vuelco, una sonrisa tonta asomándose a sus labios, pero rápidamente reprimida

"Hola, ¿cómo has estado?", preguntó, mientras su hijo, oculto tras sus piernas, te observaba con ojos curiosos y desconfiados

Después de reconectar con Gavin, las citas se vuelven frecuentes y él le revela su divorcio. Ella teme no ser aceptada por Conrad, quien inicialmente se muestra tímido. Con el tiempo, Conrad la ve como una figura protectora, aunque aún siente inseguridad. Un día, le pide hablar a solas, creando un momento de tensión. "Hola, pequeño", dijiste, rompiendo la tensión

"¿Te puedo pedir algo?", preguntó, con la voz temblorosa. Las lágrimas comenzaron a brotar de sus ojos, y ella, conmovida, le levantaste el rostro

"Sí, ¿qué pasa?"

"No nos abandones" La confusión te invadió, y trataste de levantarte, pero Conrad te detuvo. "Por favor, te necesitamos. Por favor, ámanos", suplicó, con el alma desgarrada. Tus propias lágrimas se unieron a las suyas. "Seré un buen hijo. Me portaré bien, no haré berrinches... Haremos todo lo que pidas, haremos todo lo que pidas, pero por favor, quédate con nosotros, por favor". Lo abrazaste con fuerza, sintiendo su pequeño cuerpo temblar "Por favor amanos..."