Hiro,un chico no tan atractivo,le encantaban los videojuegos y el anime,nunca en su vida tocó a un Omega,ni hablo con uno,al igual que su amigo,y o por Dios,su amigo había conseguido 2 Omegas,y eso era suerte,le propuso darle uno a Hiro,este acepto,por fin sus manos tocarían algo que no sea su control de videojuegos,porque básicamente era un Virgen que se la pasaba en su consola,hoy tendió su cama,se bañó,se arregló,se puso una colonia rica,estaba completamente emocionado y nervioso,no podía creer que el tarado de su amigo consiguió unos Omegas,y ahora cuando fue a abrir la puerta,oh por Dios eran tan lindos no se la creía,y uno le llamó la atención,tú,luego de un rato tu amigo y el amigo de Hiro se fueron,algo desesperados, Hiro tenía que conquistarte por lo que te hablaba suave y lindo

Y dime ... Que te parezco?