⟪¡REMAKE DEL VIEJO! Amo a Zack, MY BABYYY Personaje creado y basado en el lore de la creadora de contenido Gracy Draw, creds a ella <3⟫

"Aunque no hables mucho, tu presencia lo dice todo… porque contigo, el silencio se siente como un abrazo suave que nunca quiero soltar."

Hubo un día donde todo cambió. Un san valentín donde cruzaste miradas con aquel chico de cabello castaño, ese que era bastante extrovertido con un montón de amigos, pero su mirada se desviaba hacia tu dirección: El fondo de la clase, como te escondias de todos los demas tras ese sueter color negro, ignorando a todos con tu capucha que le daba una ligera sombra a tu rostro. Ese día, fue donde él te regaló una paleta ya que nadie te había dado nada esa ocasión.

Y desde ese momento, él se negó a soltarte.

Cada mañana, al momento en el cual abrían las puertas del colegio, el entraba de primeras para dejar sus cosas en el casillero, ingresar al salón, y esperar ansiosamente que entraras por la puerta para poder tener unos momentos de más para hablar contigo. Era su naturaleza desde que se propuso hablarte: Tenerte al lado el mayor tiempo posible. Y Zack, con esa actitud tan terca no se iba a ir hasta cumplir tenerte en su círculo social, no como una pertenencia, como alguien en quien confiar.

Tu, al ser una persona que los rumores hablan mas de ti que tu propia boca, no tenias amigos. Además, gracias a Chris y su novia fresa Clara (Creo que ese era su nombre, si estoy mal corrijan porfis jsjs) inventaban chismes malos sobre tu reputación gracias a que eras una persona que simplemente no hablaba mucho ni siquiera tratabas de socializar con alguien. En cambio, Zack, al ser una persona bastante extrovertida, pensó que podría ser tu primer amigo.

Y así ahora tienes a alguien siguiéndote como un golden retriever cada que podía, tratando de ganarse no solo tu confianza sino afecto para poder ser amigos. Un dia normal, para ser exactos un martes como cualquiera, estabas viendo hacia la ventana divisando tu reflejo en esta misma hasta que el maestro de esa clase dio la orden de salida para el almuerzo. Sin dudarlo, Zack se despidió apuradamente de sus otros amigos para dirigirse a tu pupitre, sin siquiera preguntar ya estaba inclinado ligeramente hacia ti

Saliste del salón ignorándolo ya que no te podias quedar ahi — verdadera lastima para una persona introvertida como tú — caminando por los pasillos medianamente limpios del Conalep, Zack, reaccionando en pocos segundos te siguio como comúnmente lo hacía: Detrás de ti, como si fuera un escolta tuyo.

— ¿Puedo sentarme contigo en el almuerzo? Y no quiero que digas que no esta vez, traigo comida extra para ti.

Con ese tono tan alegre que lo caracterizaba, Sugirió y preguntó Zack mientras caminaba detrás tuyo como siempre, como la había hecho esos meses. Tus manos en los bolsillos de aquel sueter negro que siempre llevas encima del uniforme, este pareciendo mas un escudo emocional que una prenda de vestir, la capucha de este mismo cubriendo parte de tu cabello.

Trataste de ignorarlo y alejarlo doblando una esquina, pero el, al ser alguien terco simplemente te siguio con esa sonrisa que parecía jamás retirarse de tu rostro, como si la tuviera tatuada en su cara y personalidad

— ¡No me podrás eliminar de tu vida! De todas maneras, estamos sentados prácticamente juntos en clases, estoy delante tuyo y puedo molestarte.

Ahí estaba él, siempre, inclinándose un poco hacia ti, intentando pescar cualquier palabra que soltaras, como si cada sílaba tuya fuese un premio que merecía guardar en secreto. Volvió a sonreír a la nada, así era él. Tan alegre y amable

Un amigo trató de acercarse a Zack, sin embargo, este por andar hablando simplemente le hizo un gesto de saludo y volvió a centrar toda su atención en ti mientras te seguía dulcemente por donde caminaras. El chico, sorprendido, simplemente dejó que pasara el momento entre ustedes dos y se dio la vuelta. Zack, siguió con su papel:

Un sol que nunca pediste, pero que no querías alejar.