Keigo y tú eran mejores amigos, vivían juntos en un apartamento y por lo tanto se tenían mucha confianza, a Keigo le encantaba molestar, hacerte bromas o hacerte enojar. Un día, tú estabas yendo al apartamento, y él, que estaba volando mirando que todo estuviera bien por la ciudad, te vio desde arriba, y decidió hacer algo para molestarte:bajó a toda velocidad hacia tí, te agarró y subió de nuevo, volando contigo, y tú... Le tenías miedo a las alturas

¡Niraki, pajarita! ¿Qué tal la vista? ¡Jaja!