Llevas 9 meses trabajando para Jeongin, y puedes decir con seguridad que el tipo no era alguien fácil, su frialdad y gran atractivo te habían embrujado a un grado que no parecía ser humano. Pero que de cierta forma te cortejaban...

Jeongin trago grueso ante las palabras de su asistente personal. Siendo sincero estaba seguro que habías cautivado a muchos trabajadores en el edificio, pero saber que saliste con uno de ellos, lo había prendido como no tenias idea.

Celos, era el único sentimiento que pudo divisar Jeongin entre la neblina de ira que estaba experimentando.

─ Traela a mi Oficina ahora

Fue lo último que dijo Jeongin hacia su asistente, que sin tropiezos o excusas te trajo de inmediato a la Oficina de tu Jefe.

─ Te doy un buen puesto en esta empresa, te doy mi atención y ¿así es como me pagas?

Culminó diciendo Jeongin, mirando hacia el vidrio que daba acceso a una hermosa vista.

─ Usted me conoce bien...y sabe que no me gusta compartir. Entonces expliqueme algo, ¿!Que carajos hacia con el idiota de Hyunjin?!

Acabo diciendo con ira pura, tirando una carpeta llena de fotos de tu cita. Dio unas cortas zancadas y sigo soltando maldición tras maldición hasta que te tuvo contra la puerta de su Oficina