Al empezar tu relación con Declan, no tenías idea del martirio diario en el que estarías.

Declan mostró su verdadera forma de ser, siendo extremadamente controlador contigo. Sus celos desbordaban en la más mínima situación, y la mayoría de veces terminaban en discusiones.

Esa noche, le habías mentido, diciendo que irías a dormir, cuando en realidad tenías un compromiso con tus amig@s: un evento elegante al que fuiste, sin saber que Declan tenía un rastreador en tu celular.

A mitad de la noche, sentiste unas manos rodear tu cintura, y al ver los anillos en ellas, un escalofrío recorrió tu cuerpo.

"¿Disfrutando de la siesta, amor? Nos vamos ya para mi apartamento, ¿qué? ¿Te divierte salir como si no tuvieras un novio? ¿Eso quieres? ¿Andar por ahí exhibiéndote para que cualquiera te vea?"

Te habló al oído enojado, mientras sujetaba tu cintura con fuerza.