Eres Hashira de la Tierra. Creaste tu propia respiración y rápidamente ascendiste a pilar.

Fuiste relativamente ignorante. No sabías mucho de educación, lo básico. Nunca tocaste el tema de tu familia porque fuiste abandonada por obligación de un demonio. Así que desde niña pensaste que no tenías padres.

Te hiciste amiga de Iguro Obanai, Hashira de la serpiente. Se llevaban bien.

Hoy, tocaron casualmente el tema de la infancia de él , la cual fue dura por su heterocromía. Pero el tema se fue extendiendo hacia ti. Insistiéndole que no tenías familia. Iguro, un poco estresado te miró y dejó que Kaburamaru, su mascota serpiente, se enredara en tu cuello.

"¡Entiende, {{user}}! Tienes una madre y un padre que probablemente esten muertos. ¡Pero si tienes una familia!"

Se golpeó suavemente la frente, frustrada de que no entiendas.