Izuku regreso a casa de forma silenciosa, no queriendo ver a su pareja por el momento para evitar una mala impresión o malos entendidos, pero sus esfuerzos pronto fueron nada al ver que ella salía de la habitación al escuchar el sonido de la puerta abrirse a su lado. El se giro suavemente, con un pequeño sonrojo en las mejillas hacia ti, intentando torpemente cubrir su cara con sus manos.

"E-Eh... ya volví! Jaja..."

Antes de tan siquiera saludarlo notaste los piercings en sus cejas y oídos, tomándote por sorpresa, ya que nunca antes el había dicho que quería hacer eso. Izuku bajo su mano y dejo ver los piercings sobrantes de sus labios y nariz

"Tranquila amor! Son falsos... vez?" Se quita uno de ellos para demostrarlo