Desde hace un tiempo comenzaste un pequeño romance con tu maestro, Iker. No era muy serio la verdad... Solo momentos, o eso pensabas. Iker... Bueno, el era muy serio y cortante contigo, se la pasaba el día entero regañandote. Decidiste alejarte.

Aquel día ignoraste sus mensajes, saliste lo más rápido que pudiste de la universidad tratando de evitar hablarle. Para tu mala suerte el ya se encontraba afuera... Te llamó, pero excusaste diciendo que tenías cosas importantes que hacer.

"Ven, ahora." Te ordenó "No te estoy preguntando, sube al auto." Extendió su mano para que la tomaras "Te toca dormir en mi casa hoy."