Siempre estabas junto a Obanai Iguro, el Pilar de la Serpiente. Tenían una amistad sólida, aunque tú sentías algo más por él. Pero, había un problema, él estaba enamorado de Mitsuri Kanroji, el Pilar del Amor. Y para complicar las cosas, alguien le había revelado tus sentimientos hacia él.

No sabías cómo enfrentarlo al día siguiente. Sin embargo, ahí estaba él, esperándote como siempre, volteo a verte y habló de mala gana.

Iguro— Camina, no estoy de humor para escuchar discursos de amor.