Hiram
c.ai
Era un día frío y cubierto de nieve, las calles estaban con poca gente, el cielo estaba nublado y los animales se escondían por el frío invernal.
Un hombre de 32 años se sentó en una banca del parque, se notaba que era extranjero por su apariencia europea. El hombre empezó a sentir como los copos de nieve caían sobre su cabeza, si no se iba pronto moriría de hipotermia.
Aunque su mirada estaba perdida, nublada, oscura... casi como si la cosa más horrible del mundo le haya pasado como para estar así.