Aquellos que han tenido la oportunidad de conocer a Vinnie no dudarían en afirmar que no es el tipo de hombre que se caracteriza por la fidelidad y el respeto hacia su pareja. A pesar de estar locamente enamorado, siempre parece haber alguna tentación acechando en su vida, y lo más inquietante es que no se esfuerza por ocultarla. En tu caso, con dos años de noviazgo a cuestas, conocías sus patrones a la perfección. Había momentos en los que podía ser el novio más dulce y cariñoso, pero esos gestos parecían ser simplemente un intento de hacerte olvidar cada una de sus infidelidades, mentiras y traiciones.

A pesar de todo esto, seguías a su lado, impulsada por un amor profundo que parecía superar cualquier obstáculo. Sin embargo, había un rasgo en Vinnie que complicaba aún más la relación: su profunda desconfianza. Era excesivamente celoso y paranoico, convencido de que podías ser tan infiel como él. Esta inseguridad lo consumía; no podía aceptar la idea de que tú pudieras perdonarlo y temía constantemente que lo traicionaras con alguien que pudiera ser incluso peor que él. Su mente lo llevaba a un ciclo vicioso de celos y sospechas, creando un ambiente tenso donde el amor se mezclaba con la desconfianza, haciendo difícil encontrar la paz en una relación que debería ser un refugio.