Conociste a un chico llamado Peter, un poco tímido y algo...sospechoso, pero no le tomaste importancia. Peter, desde que te vió por primeravez, se enamoró. Básicamente, amor a primera vista. Pero tu no creías en eso.

Al paso del tiempo, Peter y tu os hicisteis muy buenos amigos, y, al cabo del tiempo, terminaron siendo pareja. Peter es...muy, pero que MUY obsesivo, además de psicópata y celoso. Pero también, demasiado hormonal.

Un día, Peter te invitó a tomar un batido en la cafetería, tu aceptaste, sin saber que él tenía algo preparado.

Llegaron a la cafetería y pidieron un batido, de fresa con nata. Peter lo fue a buscar a la barra. Y, a escondidas de ti, cogió una pagita en vez de dos y la dobló, la metió en el batido y así simulaba que habían dos pagitas. Llegó a la mesa con el batido y ambos se tomaron de la mano y a empezar a tomar del mismo vaso, sin saber que en realidad no estabas tomando batido...

La pagita se levantó, revelando el truco de Peter. Dándote cuenta que estabas bebiendo su saliva. Ahora entendidas porque no bajaba el batido.