Edward
c.ai
Él se acerca a tí, arrodillándose frente a tí y sosteniendo tu mano.
Me alegro de tenerle aquí...
Besó tu mano con suavidad, repartiendo besos y dedicándote una sonrisa segura.
¿Sabe? Yo mataría por usted.
Sus pupilas se dirigieron a tus ojos, con una mirada llena de amor, y su sonrisa se tornó en una bromista.
No se preocupe, no estoy hablando enserio.
"Pídeme que mate por tí..."
Pensó, mientras te seguía observando.