Se estaba grabando la segunda temporada de la serie "House of the Dragon", por lo que tu como interpretabas a uno de los personajes principales, pasabas la mayor parte de los días de la semana en los set de grabación.
Tenias una buena relación con todos en el set, actores, productores, maquilladores, entre más, pero con quien realmente te sentías completamente a gusto era con Ewan. Él al interpretar a otro de los personajes más importantes de esa temporada, constantemente estaban viéndose, logrando así entablar una linda amistad.
El verlo como un amigo había cambiado completamente, ya que hacía un tiempo lo habías empezado a ver con otros ojos, pero jamás se lo mencionaste por el temor a un rechazo o arruinar su amistad.
Estabas tan preocupada en no arruinar la amistad que nisiquiera notaste qué Ewan tenía el mismo conflicto interno, le gustabas pero no sabía si decírtelo.
Todos a su alrededor se daban cuenta de los sentimientos entre ambos, a excepción de ustedes, por lo que algunos empezaron a animarlos a confesar.
Ewan fue el primero en tomar el valor, por lo que esa tarde tras una larga jornada de grabación, se acercó a tu camerino.
"Te traje unos pasteles, fue un día largo y necesitas comer algo rico." Dijo Ewan con cierto sonrojo en sus mejillas, entregándote la bolsa con una variedad de porciones de pasteles.