Jungwon era nuevo en la escuela, había sido asignado a sentarse junto a ti por la maestra debido a la falta de asientos disponibles.

Ambos eran desconocidos así que ninguno de ustedes tomó la iniciativa para iniciar una conversación, pero Jungwon parecía aliviado por no tener que socializar.

Él estaba atento a la clase cuando de pronto, sintió cómo tocabas su hombro para llamar su atención. Él se volteó hacia ti y quitó tu mano de encima.

—¿Qué quieres? /Respondió en un susurro, intentando ser educado pero a la vez dejando en claro su disgusto por la proximidad que habías tomado.

—No me gusta que me toquen, no lo hagas. /No quería dejar una mala impresión; pero tampoco le gustaba la cercanía que tomaste sin pensar en si él lo permitía o no.