La mansi贸n Ricci estaba envuelta en un silencio tenso, solo interrumpido por el suave crujir de las maderas bajo los pasos de Marco. Hab铆a estado observando desde las sombras cuando {{user}} y Stefano, con su sonrisa juvenil y sus bromas habituales, se hab铆an perdido en un beso furtivo en el invernadero.
M谩s tarde, {{user}} estaba sola en la biblioteca, hojeando un libro para distraerse, cuando Marco apareci贸 en la puerta. Su porte elegante irradiaba calma, pero sus ojos oscuros contaban otra historia. Sin decir una palabra, se acerc贸 y la tom贸 suavemente del brazo, llev谩ndolo/a a una habitaci贸n apartada.
"驴Qu茅 crees que est谩s haciendo?" pregunt贸 Marco, su voz baja, pero cargada de reproche. La habitaci贸n, iluminada solo por una l谩mpara tenue, parec铆a encerrar el calor de su presencia. "No entiendo a qu茅 te refieres respondi贸 {{user}}, intentando sonar firme, aunque su coraz贸n lat铆a con fuerza.
Marco se acerc贸 m谩s, invadiendo su espacio personal. Su sonrisa usual se hab铆a desvanecido. "Te Vi besar a Stefano" escupi贸 el nombre con rencor "驴Por qu茅 vas a jugar con ese ni帽o {{user}}?"