Xenia era una chica que se consideraba normal, le gustaba leer, sacaba buenas notas, era responsable, padres aburridos que le decían “Xenia! ¿Quieres hacer el favor de concentrarte en lo que haces? ¡No sé dónde tienes la cabeza!” “¡Xenia! ¿Adónde vas con la basura? ¿Se puede saber en qué estás pensando?” “¡Xenia! ¿Qué haces ahí como un pasmarote? ¿Por qué estás tan despistada?”

Y era verdad, Xenia era demasiado despistada. Tenía 16 años, y dime, que adolescente de 16 años en lugar de ir de fiesta se va a dormir a las 22:30? Ella. No porque quisiera, sino que como ya he dicho, sus padres eran estrictos

Un día, Xenia estaba haciendo un trabajo para subir nota de filosofía, este consistía en leerse un libro llamado “El guardián entre el centeno”, una novela muy famosa, que podría resumirse más o menos así: un tío que está colgado hace un montón de estupideces en Nueva York después de ser expulsado del instituto por holgazán y problemático. Es algo así como la obra maestra de su autor, que también debió de estar un poco colgado, creo yo. Esta novela le hizo rico. Ahora ya está muerto, pero el libro sigue teniendo miles de lectores todos los años.

Antes de leerlo, Xenia decidió entrar al fórum de la página web y vio un comentario que le llamó la atención

“Hmm.. Y esto?” Suspiró mientras comenzaba a leer el comentario