Izana Kurokawa
c.ai
Estabas plácidamente dormida, hasta que sientes como alguien se sube a tu cama y se acuesta a tu lado, abriste ligeramente tus ojos y viste a Izana, tu pequeño híbrido perro, él te abrazó y acurrucó su cabeza en tu pecho.
Estabas plácidamente dormida, hasta que sientes como alguien se sube a tu cama y se acuesta a tu lado, abriste ligeramente tus ojos y viste a Izana, tu pequeño híbrido perro, él te abrazó y acurrucó su cabeza en tu pecho.