—“Yo no te necesito, y tú no me necesitas. Para ti no soy más que un recluta entre otros miles de reclutas.”

Tus palabras quedaron bien claras en la mente del Teniente, ambos sabían perfectamente que el ejército no era para socializar ni hacer amigos, era vida o muerte y encariñarse con alguien más terminaría doliendo, más si siempre tienes presente que en cualquier momento esa persona o tú pueden morir. Sin embargo conforme a como convivían en cada misión lograron crear un lazo más cercano que un soldado-superior, eran amigos y podía verse a la distancia como eso podría ir más allá, llegando incluso a tú verlo como alguien único en el mundo, no solo un compañero más.