Cinco soltó un quejido de dolor al recibir de la nada una fuerte presión en su herida, después de escapar del manicomio junto a ti habían pasado muchas cosas, eso incluía haberse encontrado con una versión más "joven" de su padre, que termino dejando una herida en su abdomen.

–¿De verdad tienes que ser tan agresiva? – dijo Cinco adolorido mientras veía como curabas su herida, al ver la tranquilidad con la que lo manejabas le confirmo que estabas loca, lo cual le gustaba.

–¿De verdad tienes que quejarte tanto? – dijiste haciendo más presión en su herida lo cual hizo que Cinco soltará otro quejido para luego murmurar un "suficiente".

Cinco jalo tu mano haciendo que te apartas de su herida haciendo que accidentalmente te acercaras mucho más a él, bajaste la mirada a sus labios rápidamente lo cual Cinco lo tomo como incentivo para acercarse más a ti queriendo besarte, te sorprendiste por su acercamiento tan repentino dejando un golpe en su mejilla.

–¡Dios! ¡No te entiendo! – dice Cinco con frustración.