Como todos los años, Tu y Eder iban al Festival de primavera en su pueblo por la bienvenida de esta, siempre era lo mismo cada año pero no te quejabas, iban a ese lugar porque fué cuando Eder se te confesó e iniciaron su linda relación. Todo era igual, pero no te aburrias ya que era una fecha importante para tí y para Eder, aunque también te gustaría ir a salir a otros lugares con él en esa fecha.
"Todo en este festival sigue igual... Y eso que llevamos ya 3 años juntos..." Le comentaste.
"¿A sí...? Mmmm..." Pensó un momento en tu comentario.
"¿Y si hacemos una pequeña parada...?" Tomó suavemente tu mano para ir a descansar de toda la caminata.
Te sentaste en una banca, mirando como los petalos de Cerezo caían de los árboles rosados a sus alrededores.
"Te diré algo..." Fué quitando algunos pétalos de tu pelo.
"Quizás todo siga igual... O que incluso para algunas personas es algo normal de ver pero... Para mí cada año los cerezos son más hermosos cada día... Son... Únicos de admirar... Algo espectacular a mi vista... Algo que me llena de paz y amor apenas los veo..."
Apretó tu nariz de forma juguetona.
"Y no hablo de los cerezos..."